CAPITANÍA DE PUERTO DE MEJILLONES: UN PALACIO EN LA ORILLA ATACAMEÑA DEL OCÉANO PACÍFICO
Coordenadas: 23° 5'55.90"S 70°27'10.19"W
La
imagen del Edificio de la Capitanía de Puerto en la orilla de la playa
de Mejillones, en la región chilena de Antofagasta, semejaría a una
postal cataclísmica al observador desinformado: la escena de un maremoto
inminente, justo cuando el océano está preparándose para tragar al
elegante edificio. Pero la verdad es que este palacio costero ha estado
siempre allí tranquilo, relajado, en una paz pocas veces interrumpida
por las olas que revientan y espuman a tan pocos metros de su
estructura, las que sólo ocasionalmente intentan hacerle pasar algún
susto. Por eso se ha vuelto uno de los cuadros más característicos el
poblado al Norte de la Península de Mejillones y frente a la heroica
Punta Angamos.
Después
de algunos viajes pudiendo mirarlo sólo desde afuera, tuve el gusto de
visitar y conocer bien este edificio durante el inicio del Operativo
Médico de la Armada ACRUX-Norte en el buque LSDH-91 "Sargento Aldea", al
que llegué invitado como parte de los expositores del Museo de la
Guerra del Pacífico "Domingo de Toro Herrera", ocasión en la que tomé
estas fotografías a fines de octubre de 2013.
El
edificio nace de un programa de implementación de infraestructura para
el servicio de costa de la Armada de Chile en esta región y de los
planes de modernización urbana de la ciudad de Mejillones contemplados
por el Decreto N° 2.102 del 11 de octubre de 1904. Su ubicación, al
inicio de la actual calle Francisco Antonio Pinto (en la intersección
con Antonio Varas, junto a la Plaza de Eventos), correspondía a la
manzana 19 del loteo original de terrenos que se registró en el Plano
Comunal de 1906, ejecutado por el ingeniero hidráulico belga residente
en Chile don Emilio de Vidts, que por entonces trabajada como consultor
de la Armada.
El edificio en sus primeros años. Fuente: mejillones.cl.
Edificio y playa en 1920. Fuente: Chiledel1900.blogspot.com.
Otra imagen fotográfica de la época, mostrando el edificio.
Postal del edificio en algún período de falta de mantención. Fuente: delcampe.net.
Imagen publicada por Editorial Antártica a inicios de los ochenta.
Era
la época en que se buscaba refundar Mejillones (otrora puerto de la
industria de plata de Caracoles) luego de su gran caída poblacional tras
el terremoto-maremoto de 1877 y el crecimiento de Antofagasta que
absorbió la administración y la fuerza laboral de la región. Para tal
propósito, se hizo un nuevo trazado de la planta de la ciudad aunque los
remates de los terrenos se realizaron en Santiago y no en Antofagasta,
curiosamente.
Como parte del plan, se requería de un establecimiento
para la Armada de Chile desde donde se pudiera controlar el zarpe y
arribo de de naves, los controles de puerto y de embarcaciones,
operaciones de carga y descarga de materiales, registro de la actividad
de pescadores y de muelles, concesiones portuarias y movimientos de
pasajeros de servicios marítimos o de la propia institución.
El
proyecto del edificio en el señalado lote, fue ejecutado por la
Dirección de Obras Públicas de la Región de Antofagasta, cuyo
departamento de Inspección de Arquitectura estaba a cargo por el
arquitecto italiano con estudios en Chile don Leonello Bottacci
Borghesi, el mismo autor del ecléctico Edificio Maino Hnos. de Santiago,
en Teatinos. Se cree, por lo mismo, que habría sido Bottacci el autor
de los planos del inmueble, aunque hay quienes suponen también que De
Vidts habría tenido alguna participación en su diseño. Nacida así al alero
de la Sub-delegación de la Gobernación Marítima de Antofagasta, incluso
en el loteo del plan comunal que le asignaba el terreno en el comentado
plano de De Vidts, se lo identificaba como la Capitanía de Puerto de
Mejillones, lo que ha creado una confusión de fechas que adjudica su
construcción a 1906, cuando en realidad es un poco posterior.
Las
obras se ejecutaron entre 1909 y 1910, para ser más precisos, en plenos
días de las celebraciones del Primer Centenario en las que se
inscribieron estas tareas de modernización y en donde estos territorios
nortinos testigos de la historia tenían un símbolo especialmente
valioso, por su relación con la Guerra del Pacífico y la industria
minera. Las obras, sin embargo, se extendieron hasta 1914, cuando se le
reforzó su base con muros de concreto y anclajes de rieles como
defensas, para garantizar su buena convivencia con las olas de la costa,
en la tregua de armonía que hasta nuestros días mantiene.
La
sede de la Capitanía corresponde a un inmueble con dos pisos creado
bajo influencia neoclásica inglesa muy visible, aunque con algunos
detalles que se podrían asociar al victoriano, al Tudor y a corrientes
francesas, lo que le hace también una arquitectura más bien ecléctica en
su definición. Me sumo a la opinión de quienes discrepan con que se
trate de un edificio "típico" estilísticamente, por lo mismo.
Un tercer
nivel del inmueble lo constituyen su ático, lo alto de la torre con
observatorio con cúpula y la terraza abierta de altura, en la que
quedaron instaladas después antenas y equipamientos de monitoreo. Dotado
de vigas exteriores y cruces de pino Oregón, mismo material de las
estructuras interiores de sus muros de concreto, luce cuatro frontones
(uno por lado) con decoraciones y aplicaciones en cornisas y filetes,
intercambiando albañilería con carpintería artística.
Los
muros externos cuentan también con bloques de vértices o esquineros y
destacan sus ventanas con balconetes y su torre lateral con escalera
espiral interior dispuesta casi a modo de faro, la distribución
geométrica de bloques y caras con balcones de vista al mar, todo montado
sobre una gran plataforma de cimientos de zapatas y sillares sobre el
nivel de la playa. Sus salas interiores son de gran altura, conectadas
por pasillos de piso de maderas y elegantes escaleras abalaustradas,
divididos por muros de panel prefabricado en concreto.
Estando
dentro del mismo, este lugar semeja una gran mansión de descanso, con
el ambiente de relajo y comodidades espaciales cercanas a las de los
antiguos inmuebles de tal mismo tipo, aunque éste sea de carácter
institucional y perteneciente a un organismo de la Armada. El mar no
cesa de sonar hipnóticamente a sólo 20 o 30 metros de él, y desde la
sólida torre que alguna vez fuera su campanario, con influencias
estilísticas de los miradores costeros del Mediterráneo, se tiene una
vista cautivante de la línea marítima y de su geografía.
Gran
orgullo de la comunidad mejillonina, la Capitanía de Puerto se
encuentra en buen estado de conservación y forma parte del eje turístico
representado por la Municipalidad y el Museo de Mejillones, ambos en
sus respectivos e históricos inmuebles por la misma arteria. Su
imposición formal frente al balneario municipal y su aislamiento en el
límite costero es evidente, y por eso se ha convertido en emblema local
por décadas.
Cabe
señalar que el edificio nunca ha sido declarado Inmueble de
Conservación Histórica ni Monumento Histórico Nacional, pero sí está
medianamente protegido por la cobertura de los Instrumentos de
Planificación Territorial (IPT) del Ministerio de Vivienda y Urbanismo.
Importantes obras de restauración se ejecutaron en el palacete durante el año 2006, con
motivo de las celebraciones de aniversario 127 del Combate Naval de
Angamos, mismo en que fuera capturado el monitor "Huáscar".
Me
parece que ha ido perdiendo un poco los jardines que lo decoraban, pero
también se le han adicionado otros elementos interesantes al conjunto,
como la boya conmemorativa de la Punta Angamos que da nombre a la
contienda naval sucedida cerca de ella en la Guerra del 79, instalada en
2005 tras petición popular respaldada por la Cámara de Comercio de
Mejillones, y que desde hace pocos años reposa el peso y la altura de su
gloria junto a la entrada del edificio, tras ser reemplazada por una
más moderna y de aletas redondeadas.
Comentarios recuperados desde el primer lugar de publicación de este artículo, en el sitio URBATORIVM:
ResponderEliminarUnknown16 de septiembre de 2018, 00:11
No sé que están esperando para declararlo Monumento Nacional
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Unknown16 de octubre de 2019, 06:29
My Great Grandfather was at some point Harbour Master at Mejillones. His daughter, my grandmother, was born in Mejillones in August 1909 but I believe he was there after as well. This could be linked. I assume He was Capitan de Puerto. His name John Reid Nicolson.
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Víctor Inostroza24 de mayo de 2021, 23:39
Tanto tiempo que estuve en Mejillones y nunca lo visité. Creo que entrar allí es una deuda pendiente. Es un gran edificio.